Este viernes, el Estadio Presidente Perón será testigo de un choque entre Racing y San Lorenzo por la octava fecha del Torneo Clausura. Un partido que, para ambos equipos, representa mucho más que tres puntos. Para Racing, significa la oportunidad de cortar una racha negativa de cuatro derrotas consecutivas como local y escalar posiciones en la Zona A, donde se encuentra en la anteúltima posición. Para San Lorenzo, implica mantener su buen momento en la Zona B y consolidarse en la tabla anual, con la mira puesta en la clasificación a las copas internacionales del próximo año.
Racing: Entre la urgencia local y la ilusión continental
El equipo dirigido por Gustavo Costas vive un presente de contrastes. Mientras que en el torneo local no logra levantar cabeza, en la Copa Libertadores ha alcanzado los cuartos de final, donde se enfrentará a Vélez Sarsfield. Esta llave copera, sin duda, genera expectativas en Avellaneda, pero también podría ser un factor de distracción en el duelo ante San Lorenzo. Costas deberá encontrar el equilibrio entre ambos frentes para no descuidar ninguno.
¿Una cuestión mental?
El propio Costas reconoció la importancia del aspecto mental para revertir la situación del equipo. “Lo más importante es lo mental, es lo que nos está faltando, más allá de la táctica”, afirmó el entrenador. “Tenemos que recuperar la confianza. Tuvimos un bajón del primero al último y tenemos que levantarlo”.
San Lorenzo: En busca de la estabilidad institucional y deportiva
El presente de San Lorenzo es diferente. El equipo dirigido por Damián Ayude ha tenido un buen comienzo de campaña, ubicándose en la cuarta posición de la Zona B. Sin embargo, la incertidumbre dirigencial, con renuncias y divisiones internas, podría afectar el rendimiento del equipo a largo plazo. A pesar de ello, los jugadores han demostrado compromiso y profesionalismo, logrando aislarse de los problemas institucionales y enfocarse en el juego.
Un clásico reciente y deudas saldadas
En la última fecha, San Lorenzo empató sin goles en el clásico ante Huracán, en un partido que jugó gran parte del tiempo con un hombre más. Además, los jugadores habían lanzado un ultimátum a la dirigencia por una deuda salarial, que finalmente fue saldada gracias a la intervención de un grupo empresario.
Un duelo de necesitados
Racing y San Lorenzo llegan a este partido con urgencias y problemas diferentes, pero con la misma necesidad de sumar tres puntos. ¿Podrá Racing cortar su racha negativa y enfocarse en la Libertadores? ¿O San Lorenzo seguirá firme en su camino hacia la clasificación a las copas internacionales? El viernes, en Avellaneda, tendremos la respuesta.
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