La selección italiana de fútbol se encuentra en un momento crucial. Tras una dura derrota 3-0 ante Noruega, con Haaland como figura clave, en el inicio de las Eliminatorias para el Mundial 2026, la Azzurra necesita urgentemente un cambio de rumbo. El partido contra Moldavia se presenta como una oportunidad vital para levantar cabeza, especialmente siendo el último encuentro de Luciano Spalletti al mando del equipo.
Retegui, la apuesta en ataque
Para este partido decisivo, Spalletti ha confirmado la titularidad de Mateo Retegui como centro delantero. La esperanza reside en que el joven atacante pueda aportar la potencia y la definición necesarias para superar la defensa moldava y sumar los primeros puntos en la clasificación mundialista.
¿Llega Ranieri al rescate?
Pero más allá del partido inmediato, la gran pregunta que se cierne sobre la selección italiana es quién será el próximo entrenador. Tras la salida de Spalletti, el nombre que suena con más fuerza es el de Claudio Ranieri, un técnico con una vasta experiencia y reputación de 'salvador'.
Un hombre de milagros
Ranieri, quien recientemente se había retirado de los banquillos, podría volver a la acción para dirigir a la Nazionale. Su trayectoria habla por sí sola: ha rescatado equipos en situaciones críticas y ha logrado hazañas impensables. Su posible llegada ha generado gran expectativa entre los aficionados italianos.
La Federación Italiana de Fútbol confía en que Ranieri pueda revertir la situación y encaminar a Italia hacia el Mundial 2026. Las negociaciones están en curso y se espera un anuncio oficial en los próximos días. De concretarse, Ranieri asumiría el cargo tras el partido contra Moldavia, comenzando así una nueva era para la Azzurra.
¿Podrá Ranieri obrar el milagro y devolver a Italia a la senda del triunfo? El tiempo dirá. Lo que es seguro es que la selección italiana necesita un cambio radical y la experiencia y el liderazgo de Ranieri podrían ser la clave para lograrlo.