La farándula argentina está que arde. Recientes revelaciones en América TV han desatado una tormenta de controversias y conflictos entre figuras destacadas del medio. Dos incidentes particulares han capturado la atención del público: el debut de María Belén Ludueña y el enfrentamiento entre Ángel de Brito y Beto Casella.
¿Plagio o inspiración? El debut de Ludueña en la mira
El estreno del programa Tarde o Temprano, conducido por María Belén Ludueña en Canal Trece, no pasó desapercibido. Marina Calabró, conocida por su agudeza y franqueza, no dudó en criticar el ciclo en su columna para Lape Club Social en América TV. Calabró cuestionó el título del programa, calificándolo de "antigüedad", y señaló similitudes entre la escenografía de Ludueña y la de Cortá por Lozano, generando polémica en redes sociales.
"La polémica tiene que ver con la escenografía, ¿está inspirada por la de Verónica Lozano? Hay un aire de familia en los colores, las plantas. Hay demasiadas plantas en lo de Ludueña", comentó Calabró, añadiendo que Ludueña se veía nerviosa en su debut. A pesar de un rating inicial decente de 2.8 puntos, el programa aún tiene mucho camino por recorrer para alcanzar el éxito de otros ciclos de la tarde.
La pelea De Brito-Casella: Yanina Latorre revela la verdad oculta
El conflicto entre Ángel de Brito y Beto Casella escaló rápidamente en redes sociales, con acusaciones cruzadas sobre la falta de códigos profesionales. Yanina Latorre, siempre directa, reveló el trasfondo de la disputa en su programa de radio. Según Latorre, la raíz del problema reside en que Casella, al ser contactado por América TV, habría solicitado el horario de LAM, el exitoso programa conducido por De Brito.
"Hablando de códigos, voy a decirlo, total... cuando llamaron a Beto desde América, él pidió el horario de LAM. Eso es no tener códigos", afirmó Latorre. La solicitud fue denegada, ya que el horario de 20 a 22 horas está reservado para LAM. Latorre insinuó que existen otros detalles que aún no puede revelar, dejando entrever que la situación es aún más compleja de lo que se ve en la superficie.
Estos incidentes demuestran la intensidad y competitividad en el mundo de la televisión argentina, donde los egos y las ambiciones pueden generar conflictos inesperados. El público, por supuesto, observa atentamente, esperando nuevos capítulos de esta apasionante telenovela mediática.