Tragedia en Villa Devoto: Un rayo de esperanza
La tragedia que enlutó al barrio de Villa Devoto, donde una familia completa falleció por intoxicación con monóxido de carbono, tuvo un inesperado giro: un bebé de 18 meses sobrevivió. Ahora, la pregunta que surge es: ¿quién se hará cargo de su cuidado?
El Juzgado Civil N°102 de la Ciudad de Buenos Aires actuó con celeridad y otorgó la guarda provisoria a una tía paterna del menor. Esta mujer, descrita como profesional, propietaria y sin conflictos personales, será la encargada de brindarle contención y cuidado en esta difícil etapa. Sus hermanos la apoyarán en esta tarea.
¿Por qué sobrevivió el bebé?
Según las investigaciones, la falla en la calefacción de la vivienda, específicamente una caldera defectuosa y la obstrucción de las ventilaciones, provocó la acumulación letal de monóxido de carbono. El doctor Carlos Damin, jefe de Toxicología del Hospital Fernández, explicó que, al estar en una habitación separada y posiblemente mejor ventilada, el bebé tardó más en inhalar una dosis peligrosa del gas.
El futuro del bebé: Un proceso judicial en marcha
Mientras la tía paterna asume la guarda provisoria, la Justicia avanza en el proceso para definir la tenencia definitiva del niño. Los abuelos maternos y un tío, que residen en Europa, ya se encuentran en Argentina. La clave para una resolución rápida reside en el acuerdo entre las familias.
El abogado Sergio Dubove, representante de los tíos del menor, explicó que, si hay acuerdo entre las familias, el proceso será más ágil. En caso contrario, la Justicia evaluará si es necesaria una prórroga de la guarda, una tutela o incluso una adopción, siempre priorizando el bienestar emocional y social del menor. Ya se están realizando evaluaciones psicológicas y socioambientales con la colaboración de organismos de protección de derechos de la infancia.
El caso es atípico, ya que no se trata de una disputa de divorcio, sino de determinar qué es lo más conveniente para el niño, considerando el nivel de contención que puede ofrecerse tanto en Argentina como en Europa.
Por el momento, las condiciones parecen ser favorables en Argentina, ya que el bebé vivía con sus padres en España y no tenía un vínculo de convivencia con sus abuelos en Europa.