El mundo de la WNBA fue testigo de un emocionante giro el domingo pasado cuando el Atlanta Dream derrotó a las Minnesota Lynx con un marcador de 90-86, poniendo fin a la racha de 14 victorias consecutivas en casa de las Lynx. El partido, disputado en Minneapolis, mantuvo a los aficionados al borde de sus asientos hasta el último segundo.
Actuación Estelar de Brittney Griner
Brittney Griner, la estrella del Atlanta Dream, tuvo una noche espectacular, anotando 22 puntos, su máximo de la temporada. Su desempeño fue crucial para la victoria de su equipo, que ahora tiene un récord de 15-10. Jordin Canada también contribuyó significativamente con 18 puntos, mientras que Shatori Walker-Kimbrough añadió 12 saliendo desde el banquillo.
Napheesa Collier Lucha en Vano
A pesar de la derrota, Napheesa Collier de las Lynx tuvo una actuación sobresaliente, anotando 32 puntos con una eficiencia impresionante de 14 de 18 tiros. Además, sumó 8 rebotes, 7 asistencias, 4 robos y 2 bloqueos. Sin embargo, su esfuerzo no fue suficiente para superar el juego colectivo y la efectividad del Atlanta Dream.
Un Final de Partido Dramático
Las Lynx mostraron una gran determinación en los minutos finales, reduciendo una desventaja de 13 puntos a solo 3. No obstante, un tiro libre crucial de Jordin Canada a falta de 7 segundos selló la victoria para el Dream. La efectividad del Atlanta Dream en los tiros de campo, especialmente en el primer y cuarto cuarto, fue un factor determinante en el resultado.
Análisis del Partido
A pesar de que las Lynx dispararon con un 56% de efectividad en tiros de campo, su dependencia en Collier y una menor eficiencia después de ella (48%) les costó caro. Además, fueron superadas en la línea de tiros libres, lo que demuestra la importancia de la defensa y la disciplina en momentos clave del partido.
Próximo Desafío para las Lynx
Las Minnesota Lynx buscarán recuperarse de esta derrota el próximo miércoles, cuando se enfrenten a las actuales campeonas de la WNBA, las New York Liberty. Este será el primer encuentro de la temporada entre los dos finalistas de la WNBA del año pasado, prometiendo ser un partido de alto calibre.